ANA LA DE AVOLEA, L.M.Montgomery.

Sinopsis: Desde que llegó a Tejas Verdes siendo una imaginativa niña pecosa de 11 años, que a pesar de su facilidad para meterse en líos se ganó el cariño de toda la gente de Avonlea, Ana se está haciendo mayor y llega ahora el momento de convertirse en una joven mujercita. A sus dieciséis años ha madurado mucho, aunque una gran parte de ella sigue siendo tan rebelde como su rojo cabello. En Ana, la de Avonlea, el tierno personaje creado por la canadiense L. M. Montgomery se enfrenta a nuevos retos como maestra de la escuela y fundadora de la Sociedad de Fomento de Avonlea, sociedad juvenil pensada para mejora del lugar. Su imaginación y su vitalidad seguirán haciendo que se vea envuelta en divertidos malentendidos y nuevos problemas que tendrá que resolver. Mientras Ana Shirley se convierte en mujer, sus aventuras y ocurrencias nos divertirán y tocaran nuestro corazón. Esta obra, al igual que toda la serie de Ana Shirley, conjuga los valores de la vida rural y la familia con las cuestiones universales que todos nos planteamos en algún momento, como la pertenencia a una tierra, el valor de la amistad o la esencia del amor.

Desde que leí Ana la de Tejas Verdes he quedado enamorada del personaje de Ana y del estilo de L.M. Montgomery. Por eso he decidido que poco a poco voy a leer toda la serie de libros de Ana que según creo son ocho.

En este caso me encuentro en la segunda novela de la serie, Ana cuenta con 16 años y comienza a dar clases en el colegio. La vida en Avolea continúa tal y como era en la anterior novela, es tranquila y apacible hasta que llegan a la vida de Ana y Marilla dos hermanos siameses de un pariente lejano que no podía hacerse cargo de ellos. Esta inesperada llegada trastocará la tranquilidad de Tejas Verdes y Marilla tendrá que lidiar junto a Ana con un niño muy inquieto y revoltoso pero que les sacará más de una sonrisa (y a mi también).

Por otra parte Ana organizará junto a Gilbert y Diana una asociación en la que se fomentará Avonlea, embelleciéndola para que a ojos de los habitantes y de los visitantes sea un lugar idílico. Pero las cosas no serán tan fáciles cuando tienen que conseguir cooperación y dinero del resto de habitantes.

Ana, pese a ser ya una jovencita, seguirá teniendo parte de esa chispa que la hizo famosa en su infancia. Es verdad que aquí ya no encontramos la frescura y el desparpajo de Ana en la primera parte pero encontraremos parte de esa gracia infantil e inocencia en dos de los personajes infantiles que aparecen en la novela.

Muchos de los personajes de la primera novela repiten en esta segunda parte a la vez que aparecen otros nuevos residentes de Avolea como el Sr. Harrison o la señorita Lavendar. Me ha encantado reencontrarme con la chismosa Sra. Lynde.

¿Ya habéis visitado Avonlea? Que no os parezca una novelas infantil y visitarla, seguro que repetiréis.

Puntuación: 7/10. Una novela que mantiene la esencia de Ana y que cuenta con nuevas y entretenidas tramas.

Precio: 15 € y 348 páginas. Toromítico.

Felices Lecturas.